Nacida en la provincia de Madrid en 1920, Lucrecia
Zurdo ha consagrado la mayor parte de su vida
a la investigación en su propia cocina y en su
propio cuerpo de la relación de los alimentos y su forma
de elaborarlos, con las funciones orgánicas.
Después de cuatro embarazos y un exceso de peso
de más de cuarenta kilos, y tras años de sufrimiento
para perderlos, consiguió volver a su peso y mantenerlo
a través de “La Cocina del Futuro”, de la que es autora.
El primer libro de esta serie de siete, vio la luz en 1969.
Desde entonces esta mujer no ha parado de absorber
y analizar todo aquello que pueda relacionar salud con alimentación. Ella misma
es la prueba viviente de la bondad de sus consejos, basados en gran parte en el
uso de alimentos complementarios, que utiliza y recomienda con profusión en
todas sus publicaciones. A sus 88 años de edad, asiste regularmente a clases de
gimnasia y natación, vive en su casa sin ninguna ayuda y es fácil verla por la calle
corriendo más que andando. Como dicen sus hijos: “siempre va con prisa, aunque
no la tenga”.
Con este nuevo libro, pretende llevar a las cocinas de los hogares el uso del
Agar-Agar, derivado de las algas, que permite condimentar una gran variedad de
platos en los que con Agar se eliminan productos específicos que en cualquier
régimen dietético estarían proscritos. En suma, se trata de prevenir y solucionar
problemas derivados de una alimentación incorrecta.
Cuando Lucrecia recomienda un plan culinario, lo hace siempre que exista
un diagnóstico médico. Estos planes habitualmente reciben la aprobación de los
médicos que, en muchos casos, recomendaron el uso de los libros de “La Cocina
del Futuro” a otros pacientes.
Una de las frases que más repite Lucrecia es: “Viví una vejez prematura y
ahora, a mis años, tengo una vitalidad que no tuve de joven. Quiero comunicar
mis experiencias porque TENER SALUD ES EL MEJOR TESORO QUE PODEMOS
DESEAR”.